Imágenes horribles muestran el momento en que un hombre se vio obligado a morder una anaconda gigante para evitar ser aplastado en un río en Brasil.
Un testigo ha filmado una aterradora experiencia cercana a la muerte cuando el hombre hunde sus dientes en la serpiente gigante mientras ésta se enrosca alrededor de ella.
El video muestra cómo luchó contra el poderoso reptil mientras estaba parado en el agua hasta el pecho.
En un intento desesperado por salvarse, el hombre salta sobre la serpiente cerca de su cabeza, mientras se ve a otro hombre agarrando su cola y un tercero intenta sacar la boya de agua del bote de madera.
Pasó más de medio minuto antes de que finalmente se rindiera y se desatara de su presa.
Un testigo filmó una aterradora experiencia cercana a la muerte cuando un hombre hundió sus dientes en una serpiente gigante que se enroscó a su alrededor en un río de Brasil.
El video muestra cómo luchó contra el poderoso reptil mientras estaba parado en el agua hasta el pecho.
El amigo de la víctima lo agarra por el cuello mientras lo recoge un barco en Terra Santa, en la selva amazónica, el domingo.
Se desconoce si el hombre resultó herido tras ser golpeado por la poderosa serpiente.
Los ataques de anaconda son raros, pero pueden ocurrir en ríos y arroyos de la selva amazónica, donde suelen vivir los reptiles.
La anaconda, también llamada boa de agua, es una de las serpientes más grandes del mundo pero no es venenosa.
Pueden medir más de ocho metros de largo y pesar más de 200 kg.
Para matar a su presa, envuelven sus cuerpos alrededor del animal y usan su fuerza bruta para apretarlo hasta que ya no puede respirar antes de tragárselo entero.
Se ve a otro hombre sosteniendo su cola mientras un tercero intenta sacar el bote de agua del bote de madera.
Pasa más de medio minuto hasta que finalmente se rinde y se deja presa de él.
El amigo de la víctima lo agarró por el cuello mientras lo recogía un barco en Terra Santa, Brasil.
Anaconda, también llamada boa de agua, es una de las serpientes más grandes del mundo pero no es venenosa (imagen de archivo)
El ataque se produce semanas después de que se descubrieran dos pitones gigantes en los bosques británicos.
Las serpientes que no son Venus, que pueden crecer hasta seis pies de largo, no son lo suficientemente grandes como para matar a adultos, pero pueden atacar a niños y mascotas pequeñas.
Una pitón bola, también conocida como pitón real, fue vista en Huntsham Wood, Tiverton, Devon, el 30 de agosto.
Y dos días después se encontró una serpiente similar en la misma zona.
El personal del Zoológico Tropicuria en Watchet, Somerset, vino a rescatar a los animales que parecían estar bien alimentados y cuidados.
Pero como las serpientes fueron encontradas cerca, los expertos creen que es posible que sus dueños las hayan abandonado deliberadamente.
Las pitones reales viven en pastizales, matorrales y bosques abiertos de África occidental y central y lucharán por sobrevivir en la naturaleza durante el invierno británico.