Se ve al presidente estadounidense Joe Biden sosteniendo una copia de ‘La guerra de los cien años contra Palestina’ del profesor emérito de la Universidad de Columbia Rashid Khalidi. El presidente saliente sorprendió a todos con su elección durante una excursión del Viernes Negro en Nantucket.
Sr. Khalidi, autor de origen palestino y libanés, respuesta En las imágenes, el cartel dice “Cuatro años tarde”.
‘Guerra de los Cien Años contra Palestina’ Enmarca el establecimiento de Israel como una “victoria colonial de colonos”, que encontró resistencia palestina. En el libro 2020, Khalidi, conocido por sus críticas mordaces a la política exterior de Estados Unidos hacia Israel, criticó al sucesor de Biden, el presidente electo Donald Trump, describiendo su administración como “portavoz de Israel”. Llamó a la administración del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu “el gobierno más extremo” en la historia del país.
Biden se ha descrito durante mucho tiempo como antisionista y su administración ha enfrentado críticas tanto de los partidos proisraelíes como de los propalestinos. “No es necesario ser judío para ser sionista. Soy sionista”, dijo durante una reunión con el presidente israelí Isaac Herzog el año pasado.
El libro critica la política israelí y el firme apoyo de Estados Unidos al Estado judío, lo que hace que resulte aún más sorprendente para el público que Biden lo haya elegido públicamente.
Si bien Joe Biden detuvo los envíos de armas pesadas a Israel a principios de este año, visitó el país en solidaridad después de los ataques de octubre de 2023. Se ha enfrentado a una fuerte reacción de activistas pro palestinos, que lo han acusado de complicidad en la guerra de Gaza, calificándolo de “Genocide Joe” en protesta.
El libro del Sr. Khalidi habla de la historia de Palestina y la llama una lucha colonial prolongada. Critica a los medios estadounidenses por percibir parcialidad y pide un futuro “basado en la igualdad y la justicia”. El texto saluda la primera intifada como una “victoria” para los palestinos y caracteriza la segunda intifada como un revés.
El libro aboga por “un camino basado en la igualdad y la justicia” que busque acabar con “la opresión de un pueblo por otro”. También destaca las políticas discriminatorias contra los palestinos, considerando sus diversos orígenes religiosos, incluidos musulmanes y cristianos.
Al describir la ecuación israelí-palestina como un “conflicto colonizador-colonizador”, el libro sostiene que tales conflictos históricamente terminan en una de tres maneras: subyugación total o exterminio de las poblaciones indígenas, como se ve en América del Norte; Derrotas y expulsiones de colonialistas, como en Argelia, que admite que son raras; o el fin del dominio colonial mediante la conciliación y la reconciliación, como en Sudáfrica, Zimbabwe e Irlanda.
Anteriormente, Joe Biden acogió con satisfacción el acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hezbolá. En una declaración conjunta con el presidente francés, Emmanuel Macron, Biden dijo que el alto el fuego protegería a Israel de las amenazas de Hezbolá y allanaría el camino para una “paz duradera” en la región. Prometió el liderazgo estadounidense para fortalecer las capacidades militares del Líbano y asegurar una paz más amplia, incluidos esfuerzos para abordar el conflicto en Gaza.