Los últimos esfuerzos para aliviar la crisis penitenciaria serán “contraproducentes”, advierten expertos jurídicos.
La secretaria de Justicia, Shabana Mahmud, dijo que la pena máxima de prisión impuesta por los magistrados se duplicaría a 12 meses.
Dijo que la medida, que entrará en vigor el próximo mes, podría reducir el atraso de 17.000 prisioneros en prisión preventiva en espera de juicio y ayudaría a eliminar el atraso en el tribunal de la corona al trasladar los casos a los tribunales de magistrados.
Pero el Colegio de Abogados Penalistas dijo que la decisión aumentaría el número de presos en Inglaterra y Gales hasta en 1.000.
“Esto es contraproducente, ya que en unos pocos meses la población carcelaria aumentará rápidamente”, afirmó.
A finales de abril había 68.125 casos pendientes de juicio en el Tribunal de la Corona. La CBA estima que ese número es ahora de 75.000.
La secretaria de Justicia, Shabana Mahmud, dijo que la pena máxima de prisión impuesta por los magistrados se duplicaría a 12 meses.
Pero el Colegio de Abogados Penales dijo que la decisión aumentaría el número de presos en Inglaterra y Gales hasta en 1.000 (imagen de archivo del Tribunal de Magistrados de Chelmsford)
En septiembre se reveló que los ministros laboristas estaban analizando planes para crear una prisión de estilo estadounidense donde los reclusos pudieran reducir su tiempo en prisión ganando puntos por buen comportamiento.
Mahmoud está de visita en Texas para recopilar algunas ideas sobre cómo el sistema penitenciario británico, en dificultades, puede copiar su éxito en la reducción de las tasas de reincidencia.
Los reclusos en Estados Unidos, famoso por los vaqueros, pueden reducir sus penas de prisión ganando puntos por buen comportamiento.
Se les otorga crédito si asisten a talleres que abordan las causas subyacentes de su delito, como el abuso de sustancias.
Los reclusos también pueden inscribirse en sesiones de formación profesional y educativa, rehabilitación de drogas y modificación de conducta para reducir el tiempo tras las rejas.
Según The Times, se cree que el Secretario de Justicia y el Ministro de Asuntos Sociales, Lord Timpson, están evaluando si un sistema similar podría funcionar en suelo inglés y galés.
Actualmente, en ambos países un prisionero es liberado dependiendo de lo peligroso que sea para el público.