Gobierno. Gavin Newsom Firmó un proyecto de ley bipartidista California tipificó el viernes como delito la cría de pulpo para consumo humano.
La nueva ley declara ilegal la cría y reproducción de pulpos en aguas estatales o en tanques acuáticos ubicados en tierra dentro del estado. Impide que los propietarios y operadores de negocios participen conscientemente en la venta de un pulpo -independientemente de su nacimiento- que haya sido criado para el consumo humano.
El texto de la ley reconoce que los pulpos son “criaturas muy inteligentes, curiosas y capaces de resolver problemas”, conscientes, sensibles y que experimentan “dolor, estrés y miedo, además de placer, igualdad y vínculos sociales”. Se observa que en estudios de investigación, estos invertebrados marinos de ocho patas han demostrado tener memoria a largo plazo y capacidad de reconocer individuos.
En una pruebaSe presentaron ocho pulpos gigantes del Pacífico a dos personas durante un período de dos semanas en el Acuario de Seattle. Uno de ellos siempre traía comida en la mano, que le daban al pulpo. El otro llevaba un palo luminoso con el que rascaba la sensible piel de los cefalópodos.
Al final de dos semanas, la respuesta del pulpo a los dos individuos fue significativamente diferente. Cuando el portador del palo se acercaba, los animales se movían y apuntaban con sus chorros de agua al infractor para que pudiera escapar rápidamente si era necesario. Pero cuando el alimentador llamó, se pararon junto al tanque y desviaron sus aviones.
Los partidarios de la nueva ley dicen que posiciona a California como líder en acuicultura humanitaria. Señalan un creciente conjunto de investigaciones que muestran que criar pulpos como alimento es cruel, ineficiente y perjudicial para el medio ambiente.
California es ahora el segundo estado (después de Washington) que prohíbe el cultivo de pulpo. Se ha introducido una legislación similar en el Senado de Estados Unidos y en Hawaii.
“Sabemos que lo que sucede en California afecta lo que sucede a nivel federal”, Jchaqueta enniferdijo el profesor de ciencias y políticas ambientales de la Universidad de Miami, cuando el proyecto de ley fue aprobado por la Legislatura. “Los estadounidenses quieren mantener a los pulpos en libertad”.