Londres:
La BBC dijo el viernes que había pedido al ex presentador caído en desgracia Huw Edwards que le devolviera el salario que recibió cuando fue arrestado en noviembre del año pasado por supuestamente tomar imágenes indecentes de niños.
Edwards, uno de los rostros más reconocibles de la televisión británica, se declaró culpable de tres cargos el mes pasado y ahora se enfrenta a una pena máxima de 10 años y una mínima de 12 meses de prisión.
La junta directiva de la BBC dijo en un comunicado el viernes que el ex presentador de noticias de 62 años había “socavado la confianza en la BBC y nos había desprestigiado”.
La emisora se enteró por primera vez de su detención el pasado mes de noviembre. En ese momento lo despidieron, pero dejó la emisora después de sólo cinco meses y entretanto recibió su salario completo.
Son alrededor de 200.000 libras (255.000 dólares), una fuente particular de indignación porque la BBC se financia con la tarifa de licencia que paga cualquier hogar en el Reino Unido que mira el canal en vivo por televisión.
La declaración de la junta decía que había “autorizado al ejecutivo a solicitar el pago atrasado al señor Edwards desde el momento de su arresto en noviembre del año pasado”.
“El señor Edwards se ha declarado culpable de un crimen atroz. Si hubiera sido sincero cuando la BBC preguntó sobre su arresto, nunca le habríamos pagado dinero público”, añadió.
No se ha confirmado si se emprenderán acciones legales si Edwards se niega a devolver el dinero.
La emisora también anunció una revisión independiente de la cultura laboral.
La policía dijo que la investigación sobre Edwards comenzó después de que un teléfono confiscado por los agentes como parte de una investigación no relacionada revelara la participación del locutor en una conversación de WhatsApp.
Edwards, presentador destacado y presentador de la BBC en eventos clave como la muerte y el funeral de la reina Isabel II, fue suspendido en julio de 2023 cuando surgieron las acusaciones por primera vez.
Renunció en abril después de 40 años en la emisora.
El propio Edwards no ha comentado públicamente sobre las acusaciones.
La marca de la BBC se basa en la confianza del público, pero la emisora se ha visto sacudida en los últimos años por escándalos que han expuesto a algunos grandes nombres como delincuentes sexuales en serie.
(A excepción del titular, esta historia no fue editada por el personal de NDTV y apareció en un canal sindicado).