Las ratas africanas gigantes, que pesan entre 1,5 y 2 kg y son entre 3 y 4 veces más grandes que las ratas marrones, se pueden utilizar para combatir el tráfico ilegal de vida silvestre. Estudiar Publicado el mes pasado por la organización sin fines de lucro APOPO. Originarias de las sabanas de Sudáfrica, estas ratas gigantes, también conocidas como ‘ratas héroe’ por quienes las entrenan, se han utilizado para detectar minas terrestres mortales y gérmenes de tuberculosis en muestras. Los científicos ahora creen que se les puede entrenar para detectar animales silvestres traficados ilegalmente mediante la detección de olores.
El estudio, realizado entre diciembre de 2017 y diciembre de 2021 en Morogoro, Tanzania, África Oriental, encontró que las ratas gigantes detectaron con éxito marfil, cuernos de rinoceronte, escamas de pangolín y especímenes de madera dura africana incluso cuando estos productos silvestres se mezclaban con elementos no objetivo. .
“Los animales que detectan olfatos representan un enfoque innovador para combatir el comercio ilegal de vida silvestre, ya que los animales pueden ser más adecuados para distinguir entre materia orgánica y menos susceptibles a los métodos de ocultación visual”, se lee en el estudio.
Observó que los métodos actuales para combatir el comercio ilegal de vida silvestre y controlar estos contenedores de envío, como los escáneres con rayos X, son costosos y requieren mucho tiempo. Según un informe Descubre la vida salvajeEntrenar a un perro cuesta alrededor de 30.000 dólares, mientras que los escáneres de aeropuerto pueden costar entre 30.000 y 1,2 millones de dólares. Sin embargo, entrenar una rata detectora sólo cuesta 8.000 dólares.
Además, las ratas son menos exigentes con sus cuidadores que los perros que suelen trabajar con el mismo oficial. Según Isabel Szot, científica investigadora entre los coautores del estudio, el peso ligero de los ratones gigantes también “desempeña un papel importante en la detección de productos de la vida silvestre porque podemos elevar los ratones a lugares más altos, como los sistemas de ventilación en el transporte”. contenedores.”
“En otras palabras, pueden llegar a donde los perros no pueden”, añadió.
A pesar del éxito de la investigación, los científicos dijeron que “se necesita más investigación para establecer la viabilidad del formato”. Para los experimentos al aire libre, los ratones tuvieron que usar un chaleco hecho a medida con una pequeña bola en la parte delantera, que emitía un pitido. Cuando una rata quiere alertar a su amo sobre un objetivo sospechoso, usa sus patas delanteras para tirar de la pelota y hacer ruidos.
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Comercio ilegal de vida silvestre
El comercio ilegal de vida silvestre se considera la cuarta economía criminal internacional más grande, con un valor de entre 7 mil millones y 23 mil millones de dólares, y está estrechamente vinculado con delitos como el lavado de dinero, la corrupción y el tráfico de drogas, armas y/o personas.
Además, la propagación de enfermedades zoonóticas se asocia comúnmente con el comercio ilegal incontrolado de especies entre países, lo que exacerba las emergencias de salud pública, como las pandemias del nuevo coronavirus.