Un poderoso terremoto de magnitud 5,5 sacudió China un día después de que un devastador terremoto matara a 126 personas en el Tíbet.
Según el Centro de la Red de Terremotos de China (CENC), el terremoto de magnitud 7 sacudió la provincia de Qinghai, en el noroeste de China, a las 15.44 horas (08.44 GMT) del miércoles.
Los datos del CENC mostraron que el epicentro estuvo en el condado de Madoi, prefectura de Golog, a una profundidad de 14 km (8,7 millas).
Se produjo horas después de que un devastador terremoto sacudiera la región autónoma del Tíbet del país, y también se sintieron temblores en la vecina capital de Nepal, Katmandú, y en partes de la India.
Un vídeo publicado por la emisora estatal china CCTV mostraba casas arrancadas de las paredes y destruidas mientras las autoridades lanzaban una desesperada operación de rescate para sacar a los supervivientes de los escombros, donde las temperaturas alcanzaban al menos ocho grados bajo cero.
Varios de los 1.500 trabajadores de rescate desplegados fueron vistos caminando entre los escombros después del terremoto, mientras que otros proporcionaron mantas gruesas y comida para mantener calientes a los angustiados lugareños.
Las imágenes de vigilancia publicadas por CCTV muestran a personas corriendo por el pasillo de una tienda mientras los estantes se sacuden violentamente, haciendo que objetos parecidos a juguetes caigan al suelo.
Un terremoto de magnitud 7,1 sacudió el condado de Dingri en el Tíbet, cerca de la frontera montañosa con Nepal, a las 9:05 a.m. hora local (0105 GMT) del martes, dijo el Servicio Geológico de Estados Unidos. Otras organizaciones de seguimiento cifran la magnitud en 6,8.
Los rescatistas y los residentes afectados por el terremoto instalaron una tienda de campaña improvisada en una aldea después de que un terremoto sacudiera el condado de Tingri en Shigatse, Tíbet, el 7 de enero.
Este condado de gran altitud en la región tibetana alberga a unas 62.000 personas y está situado en el lado chino del monte Everest.
Los datos del USGC mostraron que el propio Monte Everest, la montaña más alta del mundo, sintió un temblor de magnitud 4,5, lo que generó temores de que una expedición a la que se le permitiera escalar podría enfrentarse a un desastre.
Pueblos y hogares en zonas remotas del Himalaya cercanas al epicentro están amenazados de destrucción, mientras que la ciudad de Katmandú, en Nepal, también sintió importantes temblores.