Arte y ciencia son a veces polos opuestos, pero no es así en el caso del proyecto de investigación descrito ACS Omega. Para este trabajo, un equipo interdisciplinario combina la investigación científica, el progreso tecnológico y la exploración artística para experimentar con la producción, propiedades y aplicación de un nuevo tipo de cerámica.
En los últimos años, los científicos han estado añadiendo óxido de grafeno (GO) a lodos cerámicos (que contienen partículas de arcilla de caolín u otros materiales dispersos en agua) para hacer que las cerámicas refractarias sean más duraderas y resistentes al choque térmico. La científica de materiales Daria Andreeva y sus colegas adaptaron esta técnica para mezclar mejor GO en suspensión de caolín mediante ultrasonido. Ajustaron la concentración de GO y el tiempo de exposición al ultrasonido para encontrar las condiciones que maximizaran la fuerza y la resistencia al calor de la cerámica. El equipo también colaboró con la artista residente Delia Pravaki, quien creó obras a partir de nuevos materiales cerámicos que se exhiben en el Museo de la Universidad Nacional de Singapur.
“Exploramos las posibilidades artísticas experimentando con nuevas formas y texturas cerámicas”, señalan los autores del estudio. “El uso de las propiedades del grafeno amplía los límites del arte cerámico tradicional, permitiendo la creación de estructuras cerámicas delicadas y complejas que antes eran inalcanzables. Este enfoque no sólo aumenta las posibilidades artísticas sino que también reduce la necesidad de materiales estructurales”.
Los autores agradecen la financiación del Ministerio de Educación de Singapur.