Los científicos del Laboratorio Nacional de Oak Ridge están desarrollando una fórmula para el éxito: estudiando cómo falla un nuevo tipo de batería. El objetivo del equipo es diseñar un almacenamiento a largo plazo de la energía eólica y solar, que se produce de forma intermitente, permitiendo su mayor uso como fuentes de energía confiables para la red eléctrica.
Las baterías suelen almacenar y liberar energía a medida que los iones se transfieren entre electrodos a través de un electrolito líquido. Sin embargo, los investigadores del ORNL han desarrollado una batería en la que los iones de sodio viajan a través de un electrolito sólido más duradero y rico en energía fabricado con una conductividad mejorada.
Los electrolitos sólidos se consideran la próxima frontera en baterías, si los científicos pueden abordar desafíos como comprender cómo fallan en condiciones de alta demanda. El equipo dirigido por ORNL operó la batería bajo una corriente o voltaje alto en un potente haz de rayos X. En la Fuente Avanzada de Fotones del Laboratorio Nacional Argonne, los investigadores observaron que los iones se acumulan en los poros de los electrolitos y eventualmente forman estructuras que causan cortocircuitos.
“Podemos utilizar esta información para desarrollar estos materiales electrolíticos sólidos realmente prometedores que pueden ayudar a almacenar energía renovable durante largos períodos de tiempo”, dijo el investigador del ORNL Mengya Li.